martes, 7 de febrero de 2012

Seguía pensándole cada noche, seguía imaginando lo que éramos cuando estábamos juntos, y sigue siendo imposible no llorar ante esos recuerdo. Pero por desgracia, qué digo, por suerte, él ha rehecho su vida, aunque yo sé que sigo formando parte de él. Anhelo las noches de charlas interminables por teléfono o los sms de buenos días, su risa por una frase estúpida salida de mi boca, o lo mucho que le amaba por sus magníficos defectos. Cinco años después de todo eso puedo decir que he cambiado, que le sonrio a la vida de otra manera, que grito al mundo lo que quiero, y en estos momentos no siento lo mismo de siempre. Sentimiento de cariño floreciendo, sentimiento de amor desapareciendo. Aunque a pesar de todo siempre formarás parte de mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario